Una simpática dama de la tercera edad decidió regalarse por su cumpleaños el gusto de pasar la noche en uno de los hoteles más caros de su ciudad.
Cuando a la mañana siguiente se acercó a cancelar, el recepcionista le entregó una cuenta de $ 350 dólares!!!!
Ella explotó de ira y exigió saber por qué la cuenta era tan alta. "Es un buen hotel pero las habitaciones sin duda no valen 350 dólares por pasar una noche y sin desayuno."
El empleado le dijo que $ 350 era la "tarifa estándar" por lo que insistió en hablar con el Gerente.
El Gerente apareció y advertido por el empleado de recepción anunció: ". El hotel tiene una piscina de tamaño olímpico y un gran centro de conferencias, que están disponibles para su uso"
"Pero yo no los usé", dijo.
''Bueno, ellos están aquí, y usted pudo usarlos ", explicó el Gerente.
Luego pasó a explicar que ella también podría haber visto uno de los espectáculos internacionales del hotel por lo cual es famoso. "Los mejores artistas internacionales se presentan aquí", dijo el Gerente.
"Pero yo no fui a ninguno de esos shows", dijo.
"Bueno, nosotros los tenemos, y usted los pudo ver", contestó el gerente.
Sin importar lo que el Gerente mencionara, ella respondía: "Pero yo no lo usé!"
El Gerente no se inmutó, por lo que decidió pagar con un cheque y se lo entregó.
El Gerente se sorprendió cuando vio el cheque. "Pero señora, este cheque sólo está hecho por $ 50."
''Eso es correcto. Yo le he descontado $ 300 por dormir conmigo ", respondió ella.
"Pero no lo hice!" exclamó el Gerente muy sorprendido.
"Bueno, mala suerte, yo estaba aquí, y usted podría haberlo hecho."
El avión empieza a dar tumbos en el aire, cada vez más fuertes. Entonces aparece el piloto por la puerta de la cabina con cara de angustia y pregunta:
- ¿Conocen ustedes la frase "ver Nápoles y después morir"? Pues asómense por las ventanillas. Ahí está Nápoles...
El instructor de paracaidismo estaba contestando a las preguntas de los nuevos estudiantes, hasta que uno de ellos hizo la pregunta usual.
- Si el paracaídas no se abre, y el de reserva tampoco, ¿qué tiempo tengo antes de chocar contra el piso?
El instructor le miró y le dijo con voz profunda:
- El resto de tu vida.
Un día un granjero cruza por su plantación con una cubeta a recoger algunas frutas, al llegar al río ve dos chicas bañándose totalmente desnudas. Ellas al verlo se meten en el agua hasta el cuello y le dicen:
- No vamos a salir hasta que usted no se vaya.
- No vine a verlas a ustedes, - responde el granjero levantando la cubeta -. Solo vine a darles de comer a los cocodrilos.
Dos náufragos en una barca solitaria, creyendo que nadie los va a rescatar, uno de ellos empieza a gritar:
- ¡San Lázaro, San Lázaro, salvame. Si me salvo no vuelvo a fumar nunca, ni vuelvo a tomar, ni a fornicar, ni a drogarme!
De pronto le grita el otro:
- ¡No prometas más cosas, que ahí se acerca un barco!
Un hombre estaba sentado dentro de un bar mirando su bebida. Así pasa como media hora, mirando el vaso fijamente. En eso, llega un camionero que se para junto a él, le quita su bebida y se la toma toda de un solo trago.
El pobre hombre empieza a llorar desconsoladamente. El camionero le dice:
- Uy, hombre, era una jodita. Mirá, te compro otra bebida. No puedo ver llorar a otro hombre.
- No, no es eso. Hoy ha sido el peor día de mi vida. Primero, me quedé dormido y llegué tarde a una junta muy importante. Mi jefe, enojadísimo, me despidió. Cuando salí del edificio, me di cuenta de que me habían robado el coche. La policía dice que no puede hacer nada. Me fui en un taxi a casa y después de que me bajé, me di cuenta que había dejado mi cartera en el taxi. Entro a casa y me la encuentro a mi mujer acostada con mi mejor amigo. Salí de la casa y vine a este bar... y cuando pensaba quitarme la vida, llega usted y se toma el veneno...
Estaban 3 locos en un avión armando bardo, y de repente el piloto le dice al copiloto que vaya a ver que les pasa a esos tipos.
El copiloto se dirige a los locos y al ratito vuelve a la cabina. El piloto le pregunta:
- ¿Qué hiciste para que se quedaran quietos?
- Nos pusimos a jugar a la escuelita y les mandé tareas...
Cinco minutos después, se vuelven a alborotar y el piloto le dice al copiloto:
- Andá a ver que les pasa a esos tipos ahora.
El copiloto se va y regresa a los pocos minutos, el piloto le pregunta:
- Y ahora? ¿Qué hiciste?
- Les corregí sus tareas y como las hicieron bien, les abrí la puerta y se fueron al recreo...
Dos enajenados mentales se escapan del manicomio y andando por el campo se encuentran una escopeta, uno le pregunta al otro:
- ¿Para qué servirá ese artefacto?
El otro le contesta que no tiene ni idea. El primero se pone a mirar por el cañón y el otro aprieta el gatillo... ¡Boooooom!
Le dice el que apretó el gatillo al otro:
- ¡No me mires con esa cara! ¡yo también me asusté!
Ella tenía dos deseos finales.
Primero, quería ser incinerada. Y segundo, ella quería que sus cenizas fueran esparcidas por el Centro Comercial.
- ¿Por qué en el Centro Comercial? - le preguntaron.
- Para estar segura de que mis hijas me visitaran por lo menos dos veces por semana...
Un hombre va caminando por una calle oscura. De pronto se encuentra con otro que le apunta con un arma. El atacado comenzó a reirse...
- ¡¡¡¡Jua jua jua juaaaaaa!!!!
- ¿Se puede saber de qué carajo te reís?
- ¡De vos, nabo, jajaja! ¡No traigo ni un centavo!
- ¿Y a mí que m****a me importa? Yo soy violador, vamos! bajate los lienzos!
Van un manco, un cojo y un parapléjico al santuario de Lourdes, para ver si allí pueden curarles algo. Cuando llegan al manantial el manco decide meter el muñón en el agua, al rato saca el brazo y ve que tiene la mano completa.
- ¡Dios mío, gracias por este milagro, te rezaré todos los días!
El cojo se queda alucinado y decide meter él también la pierna; al cabo de un rato la saca y dice:
- ¡Dios mío! ¡Milagro, mi pie vuelve a estar en su sitio y con todos sus dedos! ¡Gracias!
Le toca el turno al parapléjico y dice:
- ¡Por favor, compañeros, métanme a mi entero en el agua, a ver si yo también me curo!
Sus amigos lo meten con todo y la silla de ruedas dentro del agua y un momento después lo sacan.
- ¿Qué pasa? ¿Cómo te sentís? ¡Intentá levantarte!
El inválido pretende pararse, pero tras varios intentos se rinde:
- No puedo, esto no sirve de nada.
Y le dicen sus amigos:
- ¿Cómo que no te sirvió de nada? ¡Mirá tu silla! Ruedas de aluminio, espejo retrovisor, frenos ABS y con motorcito!!!